Las cosas pueden parecer francamente difíciles, porque las circunstancias sean muy adversas. Pero en medio de todos esos problemas, con Dios siempre hay esperanza.
Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?
Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?
Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos,
Para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron.
Aunque un ejército acampe contra mí,
No temerá mi corazón;
Aunque contra mí se levante guerra,
Yo estaré confiado.
Salmo 27:1-3
Mis textos en Cristianos por Israel
1 comentario:
En “Islamización de Europa” te espera un premio.
Enhorabuena
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